En el agua las ondas de sonido
tardan más en desplazase
y el bandoneón sobre todos los marinos,
el amor de la enajenación,
y el miedo al hígado que traigo en el maletero.
Un relato
un día
un numero
uno más
De mi vida azul
sin ausencias pasadas
en el borde de la pagina
que vuelve al mar.
3 comentarios:
Hola Ges. Te mando saludos y me gusta tu poema. Creo que, siempre, las cosas van al agua. glu
Para ti.
No te apropies del mar, no absorbas algo que es más mío que tuyo...
Puede que en su inmensidad también haya espacio para ti, dudo que el mar haga distinciones sobre a quién besa y a quién no, pero me resisto a pensar que esos labios de espuma, los mismos que son míos, puedan ser de alguien más.
No te lo lleves, déjalo conmigo y mis memorias, déjame sus colores, su gusto a sal, su espuma, su danza, déjame todo lo azul, lo verde y lo submarino. Todo es mío. Todo.
Haber pinche bola de gandallas, para empezar el mar también es mío. Y en segunda me gusta el poema pero hay algo que no me cuadra del todo.
Ya deberíamos hacer un taller.
Un Saludo poeta.
Publicar un comentario